Aquel día el ranchero estaba realmente abusando del pobre burro: Lo había cargado con cuatro enormes costales llenos de sal.
El animal se tambaleaba bajos la carga y con los latigazos que le propinaba el ranchero.
De pronto hubo que cruzar un río sin puente.
En la mitad de la corriente, el burro resbala y se cae. La mayor parte de la sal se derritió. Cuando el ranchero logra que el burro se levante, este siente la carga mucho más ligera y puede caminar de prisa. Entonces el burro piensa:
"Ya descubrí la manera de no cansarme tanto, me mantendré metido en el agua todo el tiempo que pueda.
* * *
Unos días después el ranchero lleva al burro por el mismo camino. Esta vez cargaron al burro con cuatro costales llenos de esponjas, por lo tanto la carga es muy liviana.
Cuando llegaron al río y lo tuvieron que cruzar, el burro pensó: También esta vez vo a aligerar mi carga, trataré de resbalarme para caer y así permanecer un buen rato para que la carga se aligere.
Y se dejo care a la mitad del río. El ranchero lo trata de levantar dándole de latigazos. Pero ahora las esponjas se han llenado de agua y la carga ha aumentado mucho su peso y el animal no se pudo levantar.
Por no querer trabajar, el burro murió ahogado a mitad del río.
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