Tomás Moro,
el gran canciller del rey de Inglaterra Enrique VIII, fue condenado a muerte
por su fidelidad a la Iglesia Católica.
El rey,
había despedido a su legítima esposa, para casarse con otra mujer.
Tomás no
quiso reconocer como matrimonio aquellas culpables relaciones extraconyugales
del rey; y también desconoció al rey como jefe de la iglesia de Inglaterra.
Por lo
mismo Tomás fue encerrado en la cárcel llamada “Torre de Londres” y condenado a
muerte.
* * *
El rey
trató de quebrantar la resistencia de Tomás mediante el duro trato en la
cárcel, pero no lo consiguió.
Más tarde
el rey ordenó a Margarita, la hija predilecta de Tomás Moro, que fuera a ver al
papá y lo convenciera de cambiar de opinión. Todo fue en vano.
Antes de
ejecutar a Tomás, llegó la esposa. Llorando al rey, le suplicaba que tuviera
consideración por ella y por los hijos.
Entonces
Tomás le preguntó: -¿Cuánto tiempo crees que podremos vivir juntos?-
-Al menos
unos veinte años- le contestó la esposa.
-Mira, si
me hubieras dicho que podremos vivir juntos mil años más, quizás yo tomaría en
consideración tus súplicas; pero ¿Cómo crees que voy a suplicarle al rey por mi
vida terrestre y perder mi vida eterna?-
El 6 de
julio de 1535 Tomás Moro murió decapitado.
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