sábado, 19 de julio de 2014

CON UN SACO DE CARBON



Un día Jaimito entró a su casa dando patadas en el suelo y gritando muy molesto. Su padre lo llamó y Jaimito le siguió, diciendo en forma irritada:

-“Papá, ¡te juro que tengo mucha rabia! Pedrito no debió hacer lo que hizo conmigo. Por eso, le deseo todo el mal del mundo. ¡Tengo ganas de matarlo!”-

Su padre, un hombre simple pero lleno de sabiduría, escuchaba con calma al hijo, quien continuaba contando lo que le había sucedido:

-“Imagínate que el estúpido de Pedrito me humilló frente a mis amigos. ¡No acepto eso! Me gustaría que él se enfermara para que no pudiera ir más a la escuela”-

El padre, mientras escuchaba, se dirigió hacia el garaje de la casa. De una esquina tomó un saco lleno de carbón y lo llevó hasta el final del jardín. Miró a su hijo a los ojos y le propuso:

-“¿Ves aquella camisa blanca que está en el tendedero? Hazte la idea de que es Pedrito y cada pedazo de carbón que hay en esta bolsa es un mal pensamiento que va dirigido a él. Anda, tírale todo el carbón que hay en el saco, hasta el último pedazo. Después yo regreso para ver como quedó”-

El niño lo tomó como un juego y comenzó a lanzar los carbones pero, como el tendedero estaba lejos, pocos de ellos acertaron la camisa.

Cuando el padre regresó, le preguntó:

-“Hijo, cuéntame, ¿qué tal te sientes?”-

-“Muy cansado, pero alegre. ¡Acerté algunos pedazos de carbón a la camisa!”-

El padre tomó al niño de la mano y lo condujo a la casa.

-“Ven conmigo, quiero mostrarte algo”-

Lo colocó frente a un espejo grande que le permitía ver todo su cuerpo… ¡Qué susto, estaba todo negro! ¡Sólo se le veían los dientes y los ojos!

-“Hijo, como pudiste observar, la camisa quedó un poco sucia pero no es comparable a lo sucio que quedaste tú. Así mismo sucede cuando le deseamos mal a otra persona. El mal que deseamos a otros se nos devuelve y multiplica en nosotros. Por más que queramos o podamos perturbar la vida de alguien con nuestros pensamientos y deseos, los residuos y la suciedad siempre quedan en nosotros mismos”-

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